Un dilema filosófico estéril, le fue dada su primera expresión moderna por el matemático y espadachín René Descartes.

Su pregunta básica: ¿cómo la mente y el cuerpo se relacionan entre sí?

Lo que implica que los dos son tan separados como se creía que éramos el mundo y yo (otra de las joyas cartesiana).

Un filósofo más profundo habló para este siglos antes de la aparición de Descartes y su plano cartesiano.